Primer trabajo cinematográfico de Jorge Silva realizado en 1963
Ese cortometraje es una memoria de las circunstancias de una infancia marcada por el abandono, la soledad, la exclusión y el frío de los corredores del amparo de niños en el que Jorge Silva fue forzado a crecer.
Jorge después de cursar solo hasta 3ro de primaria logra trabajar como albañil para ayudar a su madre. Luego de muchos años de estudio en las bibliotecas y de aprendizaje en los cine-clubes de Bogotá concibe su primer obra como un intenso testimonio de su infancia.
En el año 2019, Felipe Colmenares realiza en la fílmoteca de la UNAM (México) una copia fotoquímica en negativo blanco y negro 16mm para su conservación y una remasterización en 2K.